No son tantos, claro está, pero podrían serlo…Puesto que Galicia goza de una amplísima variedad de carnavales ; 18 son los carnavales documentados, de los cuales 9 han sido declarados de “interés turístico” por su originalidad y antigüedad.
Habría que buscar el origen del Carnaval en las fiestas romanas tales como las “Saturnales “ (dedicadas al dios Saturno, aunque estas fiestas también vienen asociadas a la Navidad ), las dedicas al dios Baco ( el dios de vino que representa el caos , el desenfreno…) y las “Lupercales “ ( dedicadas al dios Fauno consistían en unos ritos de iniciación, donde los jóvenes romanos eran llevados al bosque durante unos días donde debían vivir como lobos salvajes, de ahí su nombre que deriva de la palabra latina “lupus”). Hay estudiosos que incluso sitúan su origen en Sumeria (unos 5000 anos A.C) o lo relacionan con el Dios Apis de la cultura egipcia.
Más tarde, serán adoptadas por la tradición cristiana dando lugar a un breve período de desfase e incluso de “mundo al revés”, donde todo estaba permitido ,de ahí la tradición de llevar la cara tapada, cubierta con máscaras (famosas son las del carnaval veneciano) para no ser descubiertos y evitar posibles represalias. Estas fiestas tenían como función hacer más llevadero el período de la Cuaresma.De hecho carnaval viene del latín “ carnem levare” , que viene a significar “abandonar la carne”.
El ANTROIDO (uno de los múltiples vocablos que designan la fiesta en la lengua gallega ) es una tradición muy antigua y muy arraigada en la Comunidad , de hecho fue de los pocos lugares en los que durante la dictadura franquista se siguieron celebrando ( desde el año 1937 al 1948 estuvieron prohibidos).
De entre los carnavales gallegos el más conocido son los de la zona sur de la provincia de Ourense , que destacan por la vistosidad y originalidad de sus enormes máscaras. Que según la zona reciben uno u otro nombre… Peliqueiros en Laza, Pantallas en Xinzo de Limia o Cigarrones en Verín.
Pero también hay otros que destacan por la vistosidad de sus trajes como los Xenerales do Ulla, cerca de Santiago de Compostela. Curiosamente tanto en el Sur de Ourense como en la zona do Ulla relacionan a estas figuras con los recaudadores de impuestos reales de épocas pasadas.
Una tradición de la que no podemos dejar de hablar es la del conocido “loro Ravachol” de Pontevedra. Una tradición ligada a la ciudad del Lérez que hace referencia a la historia del loro del boticario de la ciudad que se murió el martes de Carnaval y que ante el disgusto de su dueño , sus amigos deciden enterrarlo con toda la pompa (procesión incluida ) . Aparentemente causó tanta sensación que decidieron que se repetiría cada “Miércoles de Ceniza”.
Si Galicia es tierra de buen comer y mejor beber, durante el Carnaval esa premisa se eleva a la enésima potencia…La gastronomía en este período , potente, contundente y sabrosa tenía como función prepararnos para la “austeridad” de la Cuaresma. Destacan sobre todo los postres : filloas ( un tipo de crepe a la gallega ), orellas (un dulce que debe su nombre a su forma de “oreja”), buñuelos, rosquillas de anís, bica de Laza…
Y no podemos terminar este post sin dejarnos de referir al importantísimo patrimonio inmaterial relacionado con el mundo del carnaval : coplas, refranes , adivinanzas…Que pasaban de una generación a otra y que eran recitados sin cesar de casa en casa a cambio de un vaso de vino o de un dulce típico de carnaval.
Ven Antroido, ven axiña,
con mázcara e barullo,
para poder brincar coas mozas
e para encher ben o bandullo.